Buenos días, Cristo reina, nos vamos preparando para la oración.
Buenos días, Cristo reina,
comenzamos la oración de la mañana…
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Jueves 17 de marzo, otro gran día en el que estamos aquí, juntos, en nuestro cole.
Te invito a cerrar los ojos, ponte cómodo, ponte cómoda, déjate llevar por la música, y siente en lo más profundo de ti esta pequeña oración, este rato para hablar con Jesús, para contarle tus cosas, para que te dé fuerzas a lo largo de toda la mañana.
Respira hondo, siente cómo entra y cómo sale el aire y tu cuerpo se relaja.
Son tiempos difíciles, con noticias duras, con momentos y situaciones que vemos y que nos afectan, nos emocionan, nos calan en nuestro corazón.
Pero es precisamente ahora cuando más nos tenemos que dejar guiar por Él. Es en estos momentos cuando más sentido tiene su palabra, su forma de ver las cosas, la manera en que tratamos a los demás, el amor que somos capaces de dar sin esperar nada a cambio.
El Evangelio de Juan nos habla precisamente sobre esta idea, la de tener a Jesús, nuestro Señor, como guía, como norte.
“Tomas replicó:
-Pero, Señor, no sabemos a dónde vas, ¿Cómo vamos a saber el camino?
Jesús les respondió:
- Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie puede llegar hasta el Padre sino por mí.
Eso es, precisamente, lo que nuestro fundador, José Gras hacía, dar todo su amor y dejarse guiar por Jesús, su Rey, su camino, su verdad y su vida.
Hagamos igual que el Padre Gras, dejemos que Jesús sea nuestro camino, nos enseñe a andar de forma correcta, que nos llene de su vida, y que nuestro saludo “Cristo Reina”, sea nuestra mayor verdad.
Anima, corazón de mi Rey, mi corazón, para que, fortalecido con tu fuerza, pueda vivir adorándote toda mi vida
Cristo vence, Cristo reina, Cristo impera, Cristo luz infinita, alumbre nuestra inteligencia, amén.
Que tengáis un feliz día
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
