Oración jueves 3 de febrero


Buenos días, CRISTO REINA

comenzamos la oración de la mañana en el Nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo, amén.


 Poco después de que empezara a existir la humanidad, se reunieron varios duendes para estudiar el modo de quitar la alegría a los moradores de la tierra.

 

Uno de ellos dijo: «Debemos quitarles algo, pero, ¿qué les quitamos?». Después de mucho pensar, otro dijo: « ¡Ya sé! Vamos a quitarles la felicidad. Pero el problema va a ser dónde esconderla para que no puedan encontrarla».

 

Propuso el primero: «Vamos a esconderla en la cima del monte más alto del mundo». A lo que inmediatamente repuso otro: «No, recuerda que tienen fuerza; alguna vez alguien puede subir y encontrarla, y si la encuentra uno, ya todos sabrán donde está».

 

Luego propuso otro: «Entonces vamos a esconderla en el fondo del mar». Y otro contestó: «No, recuerda que tienen curiosidad, alguna vez alguien construirá algún aparato para poder bajar y entonces la encontrará».

 

Uno más dijo: «Escondámosla en un planeta lejano». Y le dijeron: «No, recuerda que tienen inteligencia, y un día alguien va a construir una nave en la que puedan viajar a otros planetas, y la van a descubrir, y entonces todos tendrán felicidad».

 

El último de ellos era un duende que había permanecido en silencio y escuchando atentamente las propuestas de los demás duendes. Analizó cada una de ellas, y entonces dijo: «Creo saber dónde ponerla para que realmente nunca la encuentren». Todos le miraron asombrados y preguntaron al unísono: « ¿Dónde?».

 

El duende respondió: «La esconderemos dentro de ellos mismos, así estarán tan ocupados buscándola fuera, que nunca la encontrarán».

 

Todos los duendes estuvieron de acuerdo, y desde entonces ha sido así: el hombre se pasa la vida buscando la felicidad sin saber que la trae consigo.


ORACIÓN:

Haz, Señor, que vivamos una vida sencilla y en paz.

Señor, que en nuestra casa sea importante el trabajo,

pero no más importante que la alegría;

que la comida sea el momento de alegría y de hablar;

que el descanso sea paz del corazón y del cuerpo;

que la riqueza mayor sea estar juntos.

Señor, que en nuestra casa el más débil sea el centro de la atención;

que el mañana no nos dé miedo, porque Dios siempre está cerca;

que te demos gracias por todo lo que la vida nos ofrece y tu amor nos da.

Señor, que nuestra casa sea el lugar de acogida.

 

Hoy queremos dar gracias a Dios por los hombres que trabajan en paz

y por los que construyen un mundo más feliz.

Enséñanos a amar, a luchar y a sonreír para que llegue a nosotros la felicidad, 

para que florezca la esperanza en el corazón de todos y de cada uno. Amén.


Rezamos juntos el Padre Nuestro:


“Padre nuestro que estás en el cielo,

santificado sea tu Nombre;

venga a nosotros tu reino;

hágase tu voluntad en la tierra

como en el cielo.

 Danos hoy nuestro pan de cada día;

perdona nuestras ofensas,

como también nosotros perdonamos

a los que nos ofenden;

no nos dejes caer en la tentación,

y líbranos del mal. AMÉN.”



En palabras de José Gras, "Nada somos, nada valemos ni valdremos son Cristo. Cristo es nuestro Creador, nuestro Redentor, nuestro Padre, nuestro rey, nuestro Maestro, la luz de nuestro entendimiento, la paz de nuestro corazón y la guía y fuerza de nuestra voluntad".


Cristo Vence, Cristo Reina, Cristo Impera, Cristo Luz Infinita, alumbra nuestra inteligencia, amén.


¡QUE TENGÁIS TODOS UN BUEN DÍA!


Entradas populares de este blog

Oración Jueves 23 de Enero 2025

Martes, 19 noviembre

Oración, 28 mayo 2024