Oración de la mañana día 1 de Junio 2023
Buenos días, Cristo Reina
Comenzamos la oración de la mañana, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, amén.
Comenzamos un nuevo mes, el mes de Junio. Un mes que nos proporciona muchos cambios…Llega el verano, comienzan las vacaciones, comenzamos a disfrutar de las piscina , playas, nos despedimos de nuestros amigo hasta septiembre…por ello seamos capaces de darle gracias a Dios por cada día que nos regala y seamos capaces de disfrutar cada minuto aquello que vivimos y que el señor nos ofrece.
El sol viajaba por el cielo, alegre y glorioso sobre su carro de fuego, lanzando sus rayos en todas las direcciones, a pesar de la rabia de una nube de humor de temporal, que rezongaba: —Despilfarrador, mano rota, regala, regala tus rayos, verás cuántos te van a quedar. En los viñedos cada grano de uva que maduraba sobre los sarmientos robaba un rayo al minuto, o también dos; y no había una brizna de hierba, o araña, o flor, o gota de agua, que no se tomase su parte.
Deja, deja que todos te despojen: verás cómo te lo agradecerán, cuando no tengas nada más para regalarles
El sol continuaba alegremente su viaje, regalando rayos por millones, por miles de millones, sin contarlos. Solamente al ocaso contó los rayos que le quedaban: y fíjate, no le faltaba ni si quiera uno.
La nube, de la sorpresa, se disolvió en granizo. El sol se zambulló alegremente tras el horizonte.
Oración:
Hay muchos envidiosos, como la nube de hoy, que sufren cuando los otros son generosos.
Pidámosle al Señor, que nosotros no envidiemos jamás el bien que hacen los otros, sino que los imitemos con gozo y alegría. Gracias, Señor, por la gente que se da a los demás. Te pedimos ahora por los egoístas y envidiosos, para que también ellos puedan hacerse generosos y disfrutar con el bien:
“Padre nuestro que estás en el cielo,
venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad en la tierra
como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal. AMÉN.”
En palabras del Padre Gras:
Jesús, por el inmenso amor que nos demostraste, desde la Encarnación hasta tu Ascensión al cielo y el que nos muestras a todas horas, quedándote con nosotros en la Eucaristía, concédenos la gracia de formar grupos de corazones agradecidos, que unidos al tuyo, atraigan a otros y formemos el trono de tu Soberanía.
Cristo vence, Cristo reina, Cristo impera, Cristo luz infinita alumbre nuestra inteligencia, Amén.