Oración jueves día 10 de junio
Buenos días Cristo Reina, nos preparamos para la oración.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, amén.
Los dos amigos:
En el mundo en que vivimos la verdadera amistad no es frecuente. Muchas personas egoístas olvidan que la felicidad está en el amor desinteresado que brindamos a los demás.
Esta historia se refiere a dos amigos verdaderos. Todo lo que era de uno era también del otro; se apreciaban, se respetaban y vivían en perfecta armonía.
Una noche, uno de los amigos despertó sobresaltado. Saltó de la cama, se vistió apresuradamente y se dirigió a la casa del otro. Al llegar, golpeó ruidosamente y todos se despertaron. Le abrieron la puerta, asustados, y él entró en la residencia. El dueño de la casa, que lo esperaba con una bolsa de dinero en una mano le dijo:
- Amigo mío: sé que no eres hombre de salir corriendo en plena noche sin ningún motivo. Si viniste a mi casa es porque algo grave te sucede. Si perdiste dinero en el juego, aquí tienes, tómalo. Ya sabes que puedes contar conmigo para todo.
El amigo visitante respondió:
- Mucho agradezco tus generosos ofrecimientos, pero no estoy aquí por ese motivo. Estaba durmiendo tranquilamente cuando soñé que estabas intranquilo y triste, que la angustia te dominaba y que me necesitabas a tu lado. La pesadilla me preocupó y por eso vine a tu casa a estas horas. No podía estar seguro de que te encontrabas bien y tuve que comprobarlo por mí mismo.
Así actúa un verdadero amigo. No espera que su compañero acuda a él sino que, cuando supone que algo le sucede, corre a ofrecerle su ayuda.
La amistad es eso: estar atento a las necesidades del otro y tratar de ayudar a solucionarlas, ser leal y generoso y compartir no sólo las alegrías sino también los pesares.
El curso se va acabando, y así el tiempo de estar con nuestros amigos y amigas en clase.
Y tú, ¿cuidas y te preocupas así por tus amigos/as?
¿Crees que durante este curso has cuidado de ellos cuando lo necesitaban?
¿Estás pendiente de lo que necesitan sin que ellos te lo pidan?
En muchas ocasiones, nuestros amigos/as están pasando por malos momentos, y no se atreven a contarnos las cosas. Por eso es muy importante cuidarlos y estar pendientes siempre.
Pedimos por ellos con este Padre Nuestro.
Cristo Vence, Cristo Reina, Cristo Impera, Cristo luz infinita, alumbre nuestra inteligencia. Amén.